Producto de problemas familiares y por efecto del alcohol, una persona identificado como Alexander C.G. de aproximadamente 30 años, tomó la fatal decisión de acabar con su vida al ingerir un raticida mezclado con agua.
Los familiares y vecinos al percatarse del hecho llamaron al personal de serenazgo, quienes acudieron a prestarle auxilio transladandolo al hospital Socorro.
La Municipalidad Distrital de La Tinguiña en Ica, informó que felizmente los médicos lograron salvarle la vida y lo restablecieron.
Los familiares de la víctima piden ayuda psicológica para tratar a su hermano de la depresión.