Este año, por donde se mire, no fue un buen año para el Perú, pretendíamos seguir la tendencia positiva y crecer por encima que los años anteriores.
Recibimos básicamente dos golpes que no se pudieron anticipar y un problema que si se pudo: El Niño Costero arrasó con gran parte del norte del País y con ello desequilibró los indicadores económicos de los dos primeros trimestres. Los casos de corrupción que comenzó embarrar al estado peruano, generó un daño constante durante todo el año en curso y se proyecta a que siga generando incertidumbre por la falta de información verás.
El problema, que sí se pudo anticipar, fue la reacción del gobierno de turno frente a una mayoría en el hemiciclo, donde se pasaron el año volando cabezas, bajándose leyes y acomodando los asientos para lo que fue su objetivo final, vacar al Presidente, todo este último problema generó una desestabilidad total en las políticas de turno y lo más perjudicial, desinstitucionalidad.
Entre las variables económicas más flojas de este año, fue la inversión que ya había caído muchos trimestres y recién por el tercer trimestre de este año comenzó a recuperarse, el consumo de las personas creció en cifras muy bajas, por debajo de como venia creciendo en los años anteriores.
Bajo crecimiento del empleo conlleva a bajos ingresos en las familias y por ende menos consumo
Sin duda la tecnicidad de la economía es algo complejo para explicarlo en una columna para el ciudadano de a pie, resumiendo el 2017 podría ser:
La familia común ahorra para poder construir o comprar un inmueble, años anteriores veníamos ahorrando, 8, al siguiente año 9, al siguiente 10, 2017 debió ser 11, pero solo se pudo ahorrar 10 o tal vez 9
A pesar de todo, estos últimos meses del 2017, los indicadores de la economía vienen mejorando, respecto a los anteriores, se viene la tan ansiada Reconstrucción con Cambios (aún no llega pero esperemos se empiece en el segundo trimestre del 2018), los Juegos Panamericanos, el precio creciente de los principales comodities, todo hubiera marcado un buen año.
Pero el siguiente año sera marcado básicamente por cómo se conlleve la Política, el Perú hoy sufre una crisis social, más la incertidumbre de la exigida gobernabilidad severa, esperemos que la muñeca política se pueda manejar en pro del pueblo, consciencia y respeto se exige a este gobierno.
Creo firmemente en que los buenos aires estarán a la par de una buena gestión que tanto nos merecemos, por un buen 2018, por el crecimiento de las familias. Feliz Año nuevo, volvemos con más este 2018.
Se anticipo un 2017 mucho mejor, la realidad fue otra, los distintos problemas que sacudió el País jugaron su rol y el dañado en esta ocasión fue la economía nacional.
