El sismo en Ica no cesa. El titular del Instituto Geofísico del Perú (IGP), Hernando Tavera dio una contundente declaración respecto a los constantes movimientos telúricos. Explicó que en la población hay una tendencia a creer de que los sismos ayudan a liberar energía.
Desde ya descartó esa idea. Dijo que este tipo de sismos continuos en sí no ayudan a liberar esa energía que se va acumulando para dar origen a grandes eventos sísmicos. Así lo explicó a la Agencia Andina tras se consultado sobre el tema.
Hasta este sábado 29 de octubre son 21 sismos y «son pequeños» y es contrariamente a lo que la gente piensa. No son suficientes para reducir la agresividad de un sismo futuro que podría alcanzar la magnitud 8. El sismo de mayor magnitud de este viernes en Ica alcanzó los 5.9.
«Los eventos sísmicos se han producido debido a la colisión de las placas de Nazca y la Sudamericana. Todos sabemos que vivimos en un país altamente sísmico. Lamentablemente aún no se puede predecir su ocurrencia; sin embargo, podemos trabajar en reducir el riesgo», comentó Tavera.
El IGP elaboró un Mapa de Acoplamiento Sísmico en la cual se muestra las zonas de nuestro país donde se acumula la mayor cantidad de energía. Estas están frente a las costas de Lima, zonas entre Nazca y Chala, parte de Moquegua y Tacna. Pero no frente a la región Ica.
¿A qué equivale un sismo según su magnitud?
El experto del IGP advirtió que no es posible determinar la cantidad de energía que libera un sismo (como los que se registran en Ica). Si se habla de de un cálculo se podría aplicar la siguiente equivalencia:
- Un sismo de magnitud 5 libera la energía equivalente a una bomba atómica como la que estalló en Hiroshima (Japón).
- Un sismo de magnitud 6 equivaldría a 30 bombas atómicas.
- Un sismo de magnitud 7 a 900 bombas atómicas.
- Un sismo de magnitud 8 sería similar a 27,000 bombas atómicas
- Uno de magnitud 9 libera la energía de 810,000 bombas atómicas.
“El terremoto de Japón del 2011, de magnitud 9.0, produjo una longitud de ruptura de 450 km. El sismo de Pisco (Ica) de 2007 una ruptura e 200 km. El de Arequipa en 2002 una ruptura de 300 km. El sismo de Mala (Cañete) del 22 de junio solamente ha producido una ruptura del orden de 7 km. Entonces, los pequeños sismos solamente producen rupturas de milímetros o centímetros, en comparación con los grandes sismos que sí producen grandes longitudes de ruptura” finalizó.
