Ica: INPE decomisa cableados e instalaciones que ellos mismos permitían en el Penal de Cachiche
Durante un operativo en el penal de Cachiche, se incautaron más de 300 metros de cableado ilegal. La acción revela años de permisividad y descontrol interno.
El Instituto Nacional Penitenciario (INPE) difundió con orgullo un operativo de seguridad en el penal de Cachiche, en Ica, donde se decomisaron más de 300 metros de cableado eléctrico clandestino y varios accesorios usados por los internos para conectarse ilegalmente a la red. Sin embargo, lo que fue presentado como un “apagón por seguridad” revela también años de permisividad y descontrol dentro del penal.
Según el comunicado oficial, la intervención se realizó el lunes 27 de octubre en el pabellón 7 de máxima seguridad, bajo la dirección de Nelson Espinoza Soriano. El operativo incluyó una revisión corporal de los reclusos y el retiro de socates, interruptores y cables instalados sin autorización en los pasillos y celdas.
Lo curioso es que las mismas conexiones retiradas —muchas de ellas empotradas y visibles desde hace meses— solo pudieron existir con la tolerancia del propio personal penitenciario. En el penal de Cachiche, como en muchos otros del país, los internos suelen instalar cableados para cargar celulares, conectar ventiladores o improvisar luces ante la precariedad del sistema eléctrico.
El INPE explicó que la medida forma parte de su política institucional “Seguridad en Acción”, impulsada en el marco del estado de emergencia en Lima y Callao, y que busca reforzar los controles preventivos en todos los penales bajo su jurisdicción. Sin embargo, la intervención parece más una corrección tardía que una acción preventiva, ya que las instalaciones clandestinas existían a vista y paciencia de las autoridades.
Fuentes penitenciarias indicaron que las conexiones ilegales eran tan extensas que alimentaban varias celdas y zonas comunes, lo que generaba sobrecargas y riesgos constantes de incendio. Pese a ello, no se reportó ninguna sanción para el personal que permitió el desorden eléctrico dentro del establecimiento.
El operativo terminó con el retiro y destrucción del material incautado, pero no con las preguntas sobre la responsabilidad interna. Si bien el INPE muestra el “apagón” como un logro, en Cachiche los propios internos recuerdan que durante años la electricidad fluyó con la venia del penal.
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