Desde horas de la madrugada de este 16 de marzo, el distrito de El Ingenio, provincia de Nasca en la región Ica, ha sido debastada por huaicos. La inundación sorprendió a los centenares de familias de la zona producto de los desbordes y las intensas lluvias en las zonas altas.
La Municipalidad Distrital de El Ingenio, en horas de la mañana continúa haciendo las evaluaciones de daños a través de Defensa Civil. «El distrito de El Ingenio gravemente afectado. Viviendas de adobe gravemente dañadas, institución educativa José Manuel Meza, centro de Salud El Ingenio» informaron.
«Necesitamos ayuda de todo el valle de El Ingenio para conformar brigadas de búsqueda y rescate, primeros auxilios, alimentación, identificaciones de casas inevitables y damnificados» llamaron a través de un comunicado tras el desastre.
Inundación de El Ingenio (Nasca, Ica) desde las 3:00 a.m.
Los pobladores del distrito, informaron que la inundación empezó al rededor de las 3:00 a.m. en medio de una incertidumbre. Ya días anteriores el «Río Ingenio» se había desbordado afectando unas 20 hectáreas de cultivos de palta, frejol, pallar, maíz y algodón.
El desborde se inició en el sector de Márquez Alto, donde afectó casi en su totalidad de viviendas. Este centro poblado está a unos 3 kilómetros arriba y en el transcurso de las horas el agua llegó hasta el mismo centro y distrito capital de El Ingenio.
Las familias sufrieron inundación de sus viviendas precarias, sobre todo de adobe, quincha, esteras y caña. Ellos tuvieron que retirar el agua con baldes, asimismo empujar con lo que puedan para drenar el liquido contenido en sus viviendas.
Se requiere ayuda de otro nivel
A las 10:00 a.m. están llegando el personal de Defensa Civil a varios centros poblados afectados. Los pobladores piden ayuda de maquinarías ya sea del Gobierno Regional de Ica o del mismo gobierno ejecutivo nacional. La «ayuda que se necesita ya es de otro nivel» manifestaron. En efecto todos los colegios de todos los niveles, tanto inicial, primaria y secundaria están bajo colapso.
