Ica: alcalde de Nasca genera burlas tras histriónico ingreso al río Aja para intentar hacerse el héroe
Jorge Bravo Quispe cruzó el cauce para visitar población aislada por huaicos, pero llego con las manos vacías. «ahora te dedicas a hacer estupideces»
En medio de la emergencia por el desborde del río Aja, el alcalde de Nasca, Jorge Bravo Quispe, protagonizó una escena insólita que desató burlas y críticas en redes sociales. En lugar de gestionar maquinaria y habilitar vías de comunicación para los damnificados, decidió cruzar el río nadando, sin más recursos que su presencia y promesas vacías. Su llegada a la zona de Lliquas, completamente empapado y sin soluciones concretas, fue tomada como un acto de mero figuretismo, lo que provocó una lluvia de comentarios sarcásticos y molestos por parte de los ciudadanos.
El insólito espectáculo ocurrió el 22 de febrero, cuando Bravo Quispe arribó junto a funcionarios del Ministerio de Agricultura. En lugar de llevar maquinaria para despejar los caminos o coordinar acciones concretas, decidió darse un chapuzón ante los pobladores afectados. ”¿Para qué llegó? Solo para decirles que va a ayudar, pero sin llevar nada”, comentó indignado un usuario. Otros aprovecharon para ironizar sobre su “hazaña”: “Si al menos hubiera traído un salvavidas con donaciones” o “Habilidad de morsa, cerebro de mosquito”, fueron algunas de las frases que inundaron las redes.
A su llegada, el alcalde no pudo ofrecer más que palabras. Anunció la visita del Ministro de Agricultura para el 23 de febrero y aseguró que buscaría ayuda humanitaria para los damnificados. Sin embargo, la comunidad de Lliquas, que ha quedado incomunicada por el desborde, esperaba acciones inmediatas, no promesas. “El show lo hace bien, pero ¿dónde están las máquinas para abrir caminos?”, criticó un poblador, mientras que otro sentenció: “El alcalde no es rescatista ni nadador olímpico, que deje de hacer payasadas y trabaje”.
Las redes sociales estallaron con más comentarios de burla y rechazo. “Incapaz total, puro circo y nada de gestión”, escribió un usuario. Otro cuestionó la falta de prevención: ”¿Y ahora qué sigue? ¿Se lanzará en paracaídas sobre los huaicos?”. La indignación creció entre los agricultores que han perdido sus cultivos y terrenos por la crecida del río, quienes consideran que la falta de planificación municipal los dejó desprotegidos.
El río Aja, que aumenta su caudal cada año con las lluvias en la sierra de la región Ica, es un problema recurrente en Nasca. Pese a los antecedentes, la gestión municipal no realizó trabajos preventivos en las riberas ni mejoró la infraestructura para evitar el aislamiento de las comunidades. “Tienen todo el año para limpiar los cauces, pero prefieren devolver el presupuesto o gastarlo en fiestas”, recriminó un ciudadano.
Lo que pudo haber sido un momento de liderazgo terminó convertido en un espectáculo de histrionismo, donde la única imagen que dejó el alcalde fue la de un hombre empapado, con las manos vacías y rodeado de pobladores que esperaban soluciones. “El agua se lo llevó todo, pero a él se le llevó el poco sentido común que le quedaba”, ironizó un usuario en redes, resumiendo el sentir de muchos.