Carapulcra gigante en Chincha termina en caos: asistentes se quitan la comida con las manos

Lo que debía ser una jornada de orgullo por el aniversario de Chincha terminó en descontrol total. Durante la presentación de la carapulcra con sopa seca más grande del Perú, decenas de personas se abalanzaron sobre las mesas instaladas en la Plaza de Armas, sirviéndose la comida con las manos y empujándose por alcanzar una porción.

El evento, organizado por la Municipalidad Provincial de Chincha junto con entidades regionales, buscaba batir un récord gastronómico y celebrar el cuarto aniversario del reconocimiento de la carapulcra como plato de bandera regional. Sin embargo, la falta de organización y control convirtió la jornada en un bochorno público que circula ahora en redes sociales y medios nacionales.

Vecinos y asistentes denunciaron que no hubo personal suficiente para el reparto, ni medidas de seguridad básicas para manejar a las miles de personas convocadas. “Era una fiesta y terminó en caos. La gente se metía a las mesas, todo era un desorden”, relataron testigos. En videos virales se observa a grupos sirviéndose directamente de las fuentes, mientras otros reclamaban indignados por el descontrol.

Además, el uso de la Plaza de Armas considerada patrimonio cultural, ha generado críticas hacia el alcalde César Carranza, a quien acusan de permitir eventos masivos en un espacio protegido. Vecinos cuestionan si la permisividad responde a intereses políticos en vísperas de un año electoral. “Pan y circo, pero a costa del patrimonio”, reclamaron en redes sociales.

Un exfuncionario municipal y promotores culturales señalaron que el evento no contó con una planificación profesional ni protocolos de prevención, como ocurre en actividades de gran convocatoria. “Estas cosas no pasan cuando hay trabajo técnico y respeto por la ciudad”, afirmó un organizador.